El oro del Rin

 

 

 
          Imaginen un río majestuoso de aguas cristalinas... así debió ser el Rin en épocas antiguas, el nombre en alemán del Rin es Rhein que se pronuncia exactamente que Rein que significa “puro”  Las aguas puras y cristalinas del Rin simbolizan una naturaleza inmaculada e inocente, algo así como un paraje del Edén el suave sonido del agua que avanza lenta y segura se torna una melodiosa música. Es en este bucólico ámbito que emerge en las profundidades, el oro del Rin, símbolo máximo de virtud de la inocencia, unas divinas criaturas, las hijas del Rin, juguetean alegremente en torno al reluciente oro, la misión de estos angelicales seres es custodiar el oro para que nadie se lo apropie.
          Mientras nadaban y Jugaban aparece el feo enano Alberich, rey de los Nibelungos (hijos de la niebla), apreciando su bella sensualidad quiere acercarse a ellas, pero ellas al verlo tan feo no hacen otra cosa que burlarse cruelmente de él con frívolas vacilaciones; de repente un as de luz penetra hasta el fondo del río permitiendo que se vea el brillo del oro,  Alberich queda obnubilado y sin dejar de mirar pregunta de que se trata, las hijas del Rin le contestan que se trata sólo de un bello adorno, que ilumina el fondo del río, también le cuentan que quien forjase un anillo con él podrá tener al mundo en sus manos, pero sólo quien fuese capaz de maldecir al amor tendría el conocimiento para forjar el anillo; Alberich sin vacilar y en rápida maniobra, arranca el oro, maldice al amor y se fuga velozmente con el botín robado, las hijas del Rin horrorizadas se lamentan y lloran por la desgracia.
          Mientras tanto en el Asgard, Wotan hizo construir su fortaleza, el Walhalla, desde dónde ha de gobernar el mundo, para ello empleó a los gigantes Fasolt y Fafner, los cuales la construyeron, y habiendo terminado la obra estos quieren cobrar el pago que se les había prometido, la diosa Freia, Wotan se encontraba en apremiantes  dificultades, su esposa Fricka se oponía a que se entregue a su hermana como pago, los demás dioses estaban de acuerdo con ella, ya que Freia les daba las doradas manzanas que los mantenía jóvenes por siempre; a la vez los gigantes exigían con vehemencia el pago ya amenazaban con desconocer todos los pactos con Wotan si este no cumplía con su palabra, llama a Loge que fue quien lo indujo a  celebrar este trato; llega al lugar Loge un poco retrasado, cuenta que recorrió el mundo entero buscando algo que reemplace a Freia, pero no hay nada que pueda sustituir la belleza el encanto femenino, nadie está dispuesto a renunciar al amor, pero se encontró con las hijas del Rin que le contaron su desgracia, existe un nibelungo llamado Alberich que maldijo al amor y forjó un anillo con el oro del Rin el cual le da un inmenso poder sobre todos los seres vivos, al oír esto los gigantes desearon ese anillo, resolvieron llevarse a Freia como Rehén y el rescate seria el pagado en oro, sino pagaban el recate ellos se quedarían para siempre con Freia. Al irse la diosa de la juventud los dioses comenzaron a envejecer, entonces Wotan y Loge parten hacia Nibelheim a conseguir el oro del Nibelungo.
          Alberich, que tiraniza a su esclavizado pueblo, forjó el anillo el cual tenía el don de producir oro por si solo, hizo que su hermano Mime le forjara un yelmo con el oro primigenio del Rin. Cuando llegan Loge y Wotan hace vanidoso alarde de sus posesiones, cuenta de su tesoro, del oro transformado en joyas por sus orfebres esclavos, del yelmo forjado por su hermano, el cual tenia las propiedades mágicas de transportar al instante a quien lo tuviese puesto de un sitio al otro sin importar la distancia que hubiera entre ambos, además este yelmo podía hacer invisible o darle la forma que su poseedor quisiera... así que valiéndose del anillo y el yelmo mágico planeaba dominar el mundo, entonces Loge pide que le haga una demostración de la magia del yelmo, y Alberich se transforma en un temible dragón ante el cual Loge simula atemorizarse, luego este lo induce a convertirse en algo pequeño, ya que esto implicaría mayor dificultad, en un sapo por ejemplo, Alberich accede... cuando se halla convertido en sapo así pequeño e indefenso cae en la trampa, le quitan del yelmo y lo toman prisionero, Wotan le exige que pague un rescate por su libertad, entonces ordena a sus súbditos que traigan sus tesoros, Wotan y Loge roban sus tesoros, el yelmo mágico, y finalmente también el anillo, pero al verse despojado de todas sus posesiones Alberich lanza una maldición sobre el anillo: “así como una maldición me ayudó a forjarlo maldito sea su poseedor la muerte y la desgracia le perseguirán”
          Después con el tesoro Nibelungo en mano, los dioses están dispuestos a pagar el rescate de Freia, los gigantes exigen que la cantidad de oro tiene que ser tal que cubra por completo la figura de Freia, así es que apilan los tesoros, yelmo mágico incluido,  de forma tal que cubre casi por completo la figura de Freia, falta una pequeña parte que debiera ser cubierta con el anillo, que ahora Wotan tiene en su dedo, mas este se rehusa a entregarlo, aun a pesar de la petición de los demás dioses se obstina en quedarse con el anillo, entonces aparece Erda, la sabia madre tierra, e increpa a Wotan para que seda al anillo maldito, ya que si se lo queda la raza de los dioses morirá, finalmente Wotan sede el anillo a los gigantes, ellos se van con el oro y los dioses recuperan a Freia.
          Poco después los gigantes se disputan el anillo al repartirse el tesoro, y al pelear por él Fafner mata a Fasolt; Wotan comienza a tomar conciencia de la verdadera magnitud de la maldición del anillo,  Loge lo felicita por tener tan increíble buena suerte... Al final los dioses celebran su entrada triunfal al Walhalla, Loge vacila en entrar; la hijas del Rin reclaman el oro que se les ha robado, y manifiestan su repulsión por la hipocresía de los dioses.
texto original en alemán y castellano